El jardín de rosas se congeló durante la gélida madrugada. El invierno llegó con paso firme. El cielo blanquecino avisa de la caída de más copos. El vapor que surge de la boca habladora, se transforma, se ve como el humo naciente de un cigarrillo encendido.

   Huellas de animales quedaron plasmadas tras su paso. Que bello se ve todo y que bien huele. Huele a soledad y silencio. Huele a frío y sueño. Huele a descanso y cielo cerrado. Huele.... Huele a invierno. El esperado y amado invierno.

   Triste parece el rosal de tardías rosas, pero esa tristeza le invita a descansar. Las rosas traviesas en su tiempo no quisieron brillar y ahora, ahora se congeló su palpitar. No morirá el rosal tan sólo dormirá. Las rosas, las rosas, ¡ Ay las rosas !  Las rosas, ese es otro cantar, pues ya no olerán ni crecerán ni se marchitarán. Los pétalos caerán, el viento los arrastrará, pero ellas ya no envejecerán. Mis bellas rosas que esta noche se fueron a congelar, dejando atrás la rima, es hora de continuar....

  EME82