Cuando ya no queda porqué luchar ni queda dios ni amor.

Cuando La Oscuridad es tu único camino y La Soledad tu única compañía.

Cuando el dolor te envuelve hasta el alma y el regreso está prohibido.

Caes de rodillas en la inmensidad del Bosque Oscuro, la rabia se apodera de ti y un profundo grito te parte por dentro, desgarrando los pulmones y causando una cascada de lágrimas que te lavan el rostro. Te quedas vacía. Nada importa, nada, nada....

Respiras profundamente. Todo es pasado. La Oscuridad te guía. El sosiego llega.

Una llama nace dentro de ti y te impulsa a levantarte. Comprendes las cosas de forma diferente en este instante. La venda de tus ojos calló junto a la cascada de lágrimas. Ahora todo está más claro.

¿ Por qué se ha de amar a quien nunca te amó ?

¿ Por qué se ha de sufrir por nunca se preocupó de ti ?

¿ Por qué creer en quien jamás te ayudó ? 

¿ Por qué regresar al pasado estando vivo el presente y por llegar el futuro ? ...

Puedes amar hasta reventar por dentro por su fuerte poder, pero eso no te garantiza que recibas el mismo sentimiento. Tampoco importa llorar por el dolor, pues no por ello curarás, pero aprenderás a ver la vida de forma distinta, más cercana, mucho más cercana a ti. Eres quien eres y no puedes cambiar como tampoco cambiará el mundo por tu sufrir o tu amar.

Llora o ríe, muere o vive, camina o descansa... Qué importa. Tan sólo comprende la energía que te rodea y aprende a vivir de esa forma. No cambies ni tú ni tu entorno, tan sólo modifica tu actuar y siempre se quien gana. Nunca te dejes pisar ni ahogar ni por alguien ni por nada, porque tú eres tú y eres así por un motivo:

 ¡  Eres la pieza que completa esta existencia y sin ti nada será !

                                         EME82